Bomberos Voluntarios de Pilar y de Presidente Derqui partieron en las últimas horas a Bahía Blanca para colaborar en las tareas de limpieza y desagote de pozos y garages subterráneos junto a efectivos de distintos distritos.
Llegarán junto a 300 efectivos de distintos distritos para relevar a quienes ya se encuentran trabajando en la ciudad devastada por las inundaciones. Estarán abocados a tareas de limpieza, desagote de pozos y garages subterráneos.
Bomberos Voluntarios de Pilar y de Presidente Derqui partieron en las últimas horas a Bahía Blanca para colaborar en las tareas de limpieza y desagote de pozos y garages subterráneos junto a efectivos de distintos distritos.
En el lugar de las devastadoras inundaciones ocurridas el pasado día viernes ya se encontraba el pilarense Enrique Pared, comandante general y director de operaciones de Bomberos de la Provincia de Buenos Aires.
Son alrededor de 300 los bomberos que llegan como refuerzo, para relevar a quienes llevan más de 48 horas corridas trabajando.
En este sentido, Pared llegó a Bahía Blanca el lunes a la mañana con 150 bomberos, quienes se reparte dos tareas específicas: en primer lugar, desagotar el agua de pozos y garages subterráneos de edificios, “ya que para restituirles la luz eléctrica hay que vaciarlos", contó en diálogo con Materia Prima (FM Plaza 92.1).
A su vez, “con otro grupo estamos trabajando en la limpieza. Tenemos camionetas con una motobomba, vamos a las casas que tuvieron agua hasta el techo y las hidrolavamos”. El trabajo es engorroso, ya que “en todo un día hacemos una cuadra, dos como mucho. Es un trabajo de hormiga de 8 a 21, de corrido sin parar. En una sola cuadra sacaron cinco contenedores de cosas que ya no sirven, muchas pertenencias de la pobre gente”.
Experto en situaciones de este tipo (estuvo, por ejemplo, en la explosión de un edificio rosarino, las inundaciones de La Plata y el derrumbe de un hotel en Villa Gesell), expresó que pocas veces vio algo semejante a lo ocurrido el pasado fin de semana. "La verdad que es un desastre lo que ha pasado, estamos cuidando todos los detalles para proteger también a nuestra gente, porque está muy peligroso”.
El después
Por otra parte, el bombero expresó que en la ciudad “la gente está triste, cuidan mucho a los bomberos pero tienen una gran tristeza, hay barrios que están devastados”.
De la misma manera, indicó que “estamos haciendo relevamiento porque el gobierno provincial va a reparar motores de autobombas para las localidades de Cerri e Ingeniero White, además nosotros les mandamos gente que haga guardia y los ayude en sus propias casas, porque ellos también fueron víctimas. Algunos quieren dejar sus casas para ir a ayudar a la gente. Cerri es una localidad humilde que lo sufrió mucho”.
Sobre las consecuencias del desastre, Pared admitió que “llevo 35 años de servicio y lo más parecido a esto fueron las inundaciones en La Plata (en 2013). Acá incluso un poco peor porque se trató de una masa de agua, en La Plata fue por falta de obras o mantenimiento”.
Según Pared, “a Bahía Blanca llegaron 400 milímetros de agua en masa. A un camión de 20 toneladas el agua lo levantó y se lo llevó como si fuera un bote… Fue como si a Pilar hubiese entrado el agua por las calles Rivadavia y San Martín, pero con muchos más edificios con dos o tres subsuelos”.
Conocedor del paño, Pared sabe cómo será el futuro inmediato en Bahía Blanca: “Luego de esta etapa quedará la reconstrucción: cuando las cámaras se van quedan el Municipio, los bomberos y no muchos más…”.