En medio de tensas negociaciones y tironeos por más fondos, la Legislatura bonaerense no pudo votar en la madrugada de este viernes, tal como tenía previsto, los proyectos de Presupuesto y ley Impositiva que necesita el gobernador Axel Kicillof antes de que termine el 2024.
Pese a los cambios aceptados, poco después del comienzo de la sesión en Diputados, se pidió un cuarto intermedio, y la sesión pasó, en principio para el viernes 27, entre las fiestas de Navidad y Año Nuevo. Tal vez se trate de la última oportunidad antes del inicio del 2025.
Uno de los puntos que más conflicto generó fue el reclamo de la oposición de quitar del Presupuesto el apartado del endeudamiento. El Ejecutivo había solicitado autorización para contraer una nueva deuda neta de 1,1 billones de pesos, que será emitida en moneda extranjera. A esto se suman letras del tesoro y financiamiento con organismos multilaterales, ya aprobados en años anteriores, por un monto adicional de 1,2 billones de pesos.
Desde todos los frentes
Pero las presiones de la oposición no son las únicas ni tampoco las más complejas que debe capear Kicillof se es que quiere terminar el año con el presupuesto aprobado.
Desde el propio PJ, intendentes cercanos a Cristina Fernández venían reclamando más recursos para sus municipios. De hecho, algunos de ellos llegaron a la Legislatura en la noche del jueves para seguir de cerca las negociaciones y meter mayor presión.
Según trascendió, los jefes comunales habían conseguido aumentar el 1% de la coparticipación a los distritos (unos 400 mil millones de pesos) y sumar un fondo de 200 mil millones para Seguridad.
El intendente Federico Achával había estado el jueves temprano en La Plata para seguir las negociaciones con el gobierno de Kicillof. No fue la primera visita en la emana ni tampoco la última: este viernes volvió para la firma de un convenio de Leasing con el Banco Provincia para la adquisición de bienes de capital (ver aparte).
Impuestos
Otros cambios que en la ley Impositiva eran que desaparecía el artículo 163, sobre el que había puesto el foco la oposición ya que consideraba que se consagraba una suerte de discrecionalidad en la fijación de alícuotas. También se equiparaba los valores de las mismas entre el Inmobiliario Rural (se quitaba la suba del 5%) con el Urbano. Y se fijaba el tope de incrementos en el 28% para todos los impuestos y categorías.
Desde la oposición, también reclamaban por la autarquía de IOMA y por modificaciones al Impuesto Automotor, para que los tributos que afrontan rodados con 7 años de antigüedad, y no de 11 como es por estas horas, vayan a parar a las arcas municipales.
Mientras los diputados buscaban retomar el debate en el recinto tras el cuarto intermedio, en el Senado, que iba a sesionar de forma paralela, la vicegobernadora Verónica Magario evitó una derrota ante la incertidumbre que reinaba y ordenó a los senadores no ingresar al recinto y la sesión en la Cámara alta se terminó cayendo.
Lo mismo pasó después en Diputados y, en principio, se definirá el próximo viernes.
Los números
El proyecto de Presupuesto de Kicillof establece un total de recursos $32,8 billones (con una proyección de gastos por $34 billones), lo que representa un incremento del 35,9% respecto de este año, con un amplio enfoque en nuevas inversiones y mejoras en infraestructura con la continuidad de la obra pública, según precisó el ministro de Economía bonaerense Pablo López.
$32,8 billones de pesos prevé el presupuesto provincial para el año que viene.